Coexistencia con la región semiárida y adaptación al cambio climático

Informe sobre la Bolsa de Saneamiento Rural, que tuvo lugar los días 13 y 14 de marzo en Juazeiro, Bahía

Daniela Brás
Agricultor y miembro de la Comisión de Jóvenes Multiplicadores de la Agroecología

Conocer nuevas experiencias es esencial para elevar nuestros conocimientos y abrir nuestras mentes, por eso cuando recibí la invitación para participar en el Intercambio y aprender sobre el sistema de saneamiento en la zona rural de Juazeiro-BA, no dudé en ir. Nosotros, que vivimos en la región semiárida y principalmente en zonas rurales, sufrimos escasez de agua, por lo que saber que existe una tecnología que nos permite reutilizar hasta la última gota de nuestro consumo diario es muy emocionante.

El reactor UASB, el BET y el RAC/SAF fueron los experimentos que visitamos. En el primer día, vimos la versión del reactor UASB para toda la comunidad, en la aldea Açude da Rancharia, pero esta misma tecnología tiene una versión más pequeña para una propiedad, que vimos cuando visitamos la comunidad Fazenda Cipó, al día siguiente.

El reactor UASB trata las denominadas aguas totales, que consisten en el agua procedente del inodoro, el lavado de la ropa, la vajilla y la higiene personal de la familia, que se somete a un proceso de degradación biológica mediante bacterias anaerobias en un sistema biodigestor, y después se libera en depósitos abiertos para que el sol pueda matar las bacterias. Para garantizar la eficacia del sistema de desinfección y la eficiencia del proceso, el agua debe exponerse al sol durante al menos siete días. Transcurrido este tiempo, se transfiere a un segundo depósito, donde puede bombearse para el riego de forraje. Es importante subrayar que esta agua no puede reutilizarse en el hogar ni en la producción de hortalizas.

Siguiendo en el pueblo, visitamos la BET (cuenca de evapotranspiración) y el RAC/SAF (sistema de reutilización de aguas grises/agrosilvicultura), ambos sistemas de reutilización del agua. El proyecto proporciona calidad de vida a las familias, ya que al tratar las aguas residuales que acabarían en el medio ambiente se evita la contaminación y la proliferación de vectores, reduciendo las enfermedades en la comunidad. Además, el agua que antes iba al aire libre se trata y se reutiliza en el riego de forraje para los animales de la comunidad.