Los agricultores familiares participan en un taller en Agreste de Pernambuco

Rosa Sampaio
Periodista del Centro Sabiá

Esta semana foi diferente para as mulheres da comunidade Riacho de Pedra de Baixo, em Cumaru, e do Sítio Carneirinho, em Caruaru, agreste do estado. Na terça (18) e quarta  (19), 25 agricultoras familiares assessoradas pelo Centro Sabiá participaram da Oficina de Sistematização de Experiências, realizada pela equipe do projeto e do Núcleo de Comunicação da organização. A Oficina se dividiu em duas partes, uma realizada no município de Cumaru, Comunicação e Expressão Popular, onde foi trabalhado a comunicação popular, as redes sociais e seus usos, noções de fotografias e vídeos no celular, além de treinamento para mídia. As mulheres se divertiram praticando fotos, vídeos e fazendo reportagens umas com as outras.“ Aqui a gente deixa o medo de lado, a vergonha e faz , aprende muito e ainda se diverte”, declarou a agricultora Josefa Tereza de Riacho de Pedra de Baixo.

Según Darliton Silva, comunicadora popular del Centro Sabiá, las agricultoras utilizan dos de las principales redes sociales, Instagram y WhatsApp, pero aún no tienen una rutina establecida para organizar, producir y difundir lo que producen con mucho amor, que es comida de verdad. «Es muy gratificante para mí poder contribuir a los procesos y técnicas de producción de fotos y vídeos, aportando nociones básicas a estas mujeres sobre cómo funcionan las redes sociales. No basta con saber que existen las redes sociales, hay que saber utilizarlas estratégicamente para que tus productos sean vistos, comprados y consumidos», explicó Darliton.

A segunda parte da oficina, Sistematização Coletiva de Experiências, aconteceu no segundo dia, no Sítio Carneirinho em Caruaru. Com momento de troca de experiências e a sistematização da experiência da Associação das Mulheres da Agricultura Familiar, que se juntaram, mesmo em meio a pandemia e a sedução do trabalho na costura, com a consolidação do polo da confecção no Agreste de Pernambuco, se organizaram, criaram a associação e hoje participam do Conselho de Desenvolvimento Rural do município e acessam políticas públicas, como os Programas de Aquisição de Alimentos (PAA) e o Programa Nacional de Alimentação Escolar (PNAE).

«Aquí todo está seco, ya hemos perdido mucho en la agricultura, luego en los años 2000 llegó la costura, pero es «esclavitud», trabajamos día y noche y nuestras vidas no mejoran. Así que hemos girado la llave, ya ves, la agricultura es mucho trabajo, pero estamos juntos, persiguiendo proyectos, con voz en casa y fuera de casa. Y ya tenemos nuestro propio dinero, lo compartimos todo y ha funcionado», nos dijo Amanda Alves, agricultora y presidenta de la Asociación.

Para Rosa Sampaio, periodista del Centro Sabiá y una de las facilitadoras del taller, el intercambio de experiencias y la sistematización entre las mujeres es importante no sólo para grabar, sino para difundir la acción e inspirar a otras mujeres. «Como dijimos ayer (18) en la primera parte del taller, estas mujeres son influyentes y pueden influir en más mujeres. Hoy están aquí las mujeres de Cumaru, pero una vez sistematizada la experiencia, se extenderá más allá de las fronteras, por eso optamos por la sistematización escrita y en vídeo para llegar a más agricultoras y a tantas otras mujeres que necesitan aliento», dice Rosa.

El taller tuvo una duración de dos días, con un total de 16 horas, como parte de las acciones del Proyecto Mujer Rural y Vida Saludable que lleva a cabo el Centro Sabiá, a través de la Convocatoria Pública ATER Mujer 001/2023 Lote 19.